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Recetas paso a paso

Bizcocho de platano y nueces: mi receta

¿Antojo de un postre casero? Te presento mi receta estrella: el bizcocho de plátano y nueces, una combinación perfecta de sabores que conquistará tu paladar. ¡Fácil y rápido de preparar!, es ideal para sorprender en cualquier momento.

Imagina la suavidad del plátano maduro con el toque crujiente de las nueces... ¡Irresistible! Si eres un apasionado de los plátanos, no puedes perderte la clásica receta de bizcocho de plátano, o si buscas algo más saludable, te encantará la versión sin azúcar. Y para los que disfrutan cocinando con Thermomix, aquí tienes una delicia: bizcocho de plátano y chocolate. ¡Anímate a probarlo!

Por qué te encantará esta receta

  • Explosión de sabores - La combinación de plátano te llevará en un viaje de dulces sensaciones que no querrás que termine.
  • Textura sorprendente - Cada bocado te sorprenderá con su esponjosidad y los tropezones crujientes, una delicia para tu paladar.
  • Para cualquier momento - Ya sea en el desayuno o como tentempié, este dulce es la excusa perfecta para darte un capricho a cualquier hora.

¡Los imprescindibles del bizcocho!

¡Prepárate para conocer los protagonistas que harán de tu postre de plátano y nueces una verdadera obra maestra! Necesitarás plátanos bien maduros, que aportarán esa dulzura irresistible y una textura inigualablemente húmeda; nueces, para ese contrapunto crujiente que nos encanta; y por supuesto, no pueden faltar los ingredientes clave para sostener la estructura y sabor de este delicioso postre.

  • Plátanos maduros - Busca aquellos que tengan la piel casi negra, ¡son oro puro en sabor y dulzura para tu bizcocho!
  • Nueces - Aportan ese crujido sorprendente y un sabor que casa a la perfección con el plátano. ¿No te gustan las nueces? Prueba con almendras o avellanas, ¡también quedan fabulosas!
  • Harina - La de trigo es la clásica, pero si te animas, ¿por qué no experimentar con harina de avena o espelta?
  • Azúcar - ¿Eres más de sabores intensos o sutiles? Ajusta la cantidad a tu paladar y ¡endulza tu día!
  • Huevos - Son el lazo que une todos los sabores y aportan esa esponjosidad que nos hace suspirar.
  • Levadura - El ingrediente mágico que infla tu postre hasta convertirlo en una nube de delicia.

¡Comencemos con nuestro delicioso postre de plátano y nueces! Antes de empezar, hay algunos pasos previos que deben seguirse para asegurar un resultado perfecto.

En primer lugar, vamos a precalentar el horno a 180°C. Siempre recuerdo mi primera vez haciendo uno sin precalentar el horno... ¡qué desastre! Aprendí la lección a la mala, así que asegúrate de no cometer el mismo error.

A continuación, elegimos el molde adecuado. Suelo usar uno de silicona, ya que se desmolda fácilmente y no se pega. Pero si no tienes uno de silicona, también puedes usar uno de metal o de cristal, simplemente engrásalo un poco antes de verter la masa.

Ahora, vamos a preparar los plátanos y las nueces. Para los plátanos, busca aquellos que estén bien maduros, con la piel casi negra. Estos son los que tienen más sabor y dulzura. Machácalos bien hasta obtener una pasta suave y homogénea.

En cambio, las vamos a picar en trozos pequeños. Si te gusta el crujiente, puedes dejar algunos trozos un poco más grandes. Yo suelo usar de California, pero si no las encuentras, también puedes usar pecanas o incluso almendras..

¡Elaboración de la masa!

¡Comencemos la elaboración de la masa de nuestro delicioso postre de plátano y nueces! Batimos los huevos con el azúcar hasta conseguir una mezcla esponjosa y cremosa. Yo siempre uso una batidora eléctrica para esta parte, ¡me encanta la textura que consigo!

A continuación, incorporamos los plátanos machacados y el resto de ingredientes secos. Si te gusta experimentar en la cocina, puedes probar a sustituir la harina de trigo por harina de avena o de almendra, ¡queda delicioso!

Por último, añadimos las nueces y mezclamos suavemente con una espátula. Yo suelo reservar un puñado de nueces para espolvorearlas por encima del bizcocho antes de hornear, ¡le da un toque crujiente que está de muerte!

¡Horneado y enfriado!

¡Este es mi paso favorito! Una vez que hayas vertido la masa en el molde, hornea el bizcocho a 180°C durante 25-30 minutos. Yo siempre recomiendo usar un molde de silicona, ya que el bizcocho se desmolda perfectamente y no se pega. Pero si no tienes uno, no te preocupes, simplemente engrasa un poco tu molde de metal o de cristal.

Mientras está en el horno, la casa se llena de un delicioso aroma a plátano y nueces. ¡Es irresistible! Recuerda que el tiempo de horneado puede variar ligeramente dependiendo de tu horno, así que asegúrate de comprobar la cocción insertando un palillo en el centro del bizcocho. Si sale limpio, ¡está listo!

Una vez que saques el bizcocho del horno, déjalo enfriar en el molde durante 10 minutos. Esto ayuda a que se asiente y sea más fácil de desmoldar. Después, pasa el bizcocho a una rejilla y deja que termine de enfriarse por completo. ¡Listo! Tienes un delicioso de plátano y nueces para disfrutar en cualquier momento del día.

Receta

Bizcocho de platano y nueces

Tiempo de preparación: 20 minutos
Tiempo de horneado: 40-50 minutos

Un delicioso bizcocho de plátano y nueces, perfecto para el desayuno o la merienda.

Ingredientes

  • 3 plátanos maduros
  • 100 g de nueces
  • 250 g de harina
  • 150 g de azúcar
  • 3 huevos
  • 1 cucharadita de levadura

Instrucciones paso a paso

  • Precalienta el horno a 180°C y engrasa un molde para bizcochos. Pela los plátanos y machácalos en un bol hasta obtener una textura suave.
  • En otro bol, bate los huevos con el azúcar hasta que la mezcla esté espumosa. Añade los plátanos machacados y mezcla bien.
  • Incorpora la harina tamizada con la levadura y mezcla suavemente hasta obtener una masa homogénea.
  • Pica en trozos pequeños y añádelos a la masa, mezclando suavemente para distribuirlos uniformemente.
  • Vierte la masa en el molde preparado y hornea durante 40-50 minutos, o hasta que al insertar un palillo en el centro salga limpio.
  • Deja enfriar el bizcocho en el molde durante 10 minutos, luego desmóldalo y déjalo enfriar completamente sobre una rejilla antes de servir.